ENTIERRO DE LA SARDINA
Todo comienzo tiene un final, también el Carnaval chicharrero con su original Entierro de la Sardina. Es el momento en que las lágrimas y los sollozos invaden las calles de la capital tinerfeña, en una particular cabalgata de viudas y plañideras que, con mucho sentido del humor, se resisten a decirle adiós a las carnestolendas.
Este particular sepelio que se celebra desde el siglo XIX cada Miércoles de Ceniza, está encabezado por una sardina de grandes dimensiones, que será quemada al final del recorrido, simbolizando así, el final de la fiesta de don Carnal.
Es entonces, con el olor a humo en el ambiente, cuando los carnavaleros ponen la mirada en el segundo y último fin de semana de celebración en la calle, conocido como Piñata, donde saborearán las últimas horas de la fiesta.